¡Qué no daríamos por tomar un vaso refrescante de nuestra bebida favorita en esos días de full calor! La humedad y las altas temperaturas son los motivos principales por los que suele suceder la deshidratación. Y casi siempre, cuando sale el sol, es inevitable que queramos tomar algo fresco, helado y, muchas veces, sin saborizantes o azúcares, ya que estos suelen dar más sed de lo normal. Para ello, la mejor opción siempre será un refrescante vaso de agua pura, pero no siempre es la solución para todo. ¿Qué pasa si eres de los que piensa «y si no me gusta el agua»?
¿Por qué no te gusta el sabor del agua?
Cuando alguien dice que no le gusta el agua, siempre nos quedamos con la curiosidad de por qué. Si recuerdas lo que te hemos comentado distintas veces en nuestros otros posts, sabrás a qué nos referimos. Se supone que el agua debe obedecer tres reglas: no tener sabor, color ni olor. ¿Entonces cómo a una persona puede no gustarle algo que no tiene sabor? Esto puede deberse a distintas causas:
- De repente cuando eras pequeño no fuiste acostumbrado a tomar agua de manera adecuada.
- Prefieres sentirle «sabor» a las cosas, y por eso optas por bebidas saborizadas o azucaradas.
- Prefieres lo más rico a lo más saludable.
- Porque a veces el agua que tomas en tu casa sí tiene un sabor raro, o «cositas» extrañas que flotan en ella.
- Porque como no había agua al alcance, simplemente no la consumías.
Adicional a esos motivos, también puede que sea porque, como otras personas, logras encontrarle un sabor determinado al agua. Por ejemplo, el sabor al agua del caño, al agua hervida, al agua con mucho cloro, entre otros, lo que hace que beber agua sea una experiencia estresante y desagradable.
El problema principal: El Sabor
Sí, como habrás notado en el punto anterior, el sabor es el motivo principal por el que muchas personas deciden ponerle una X al agua.
Pero esto no tiene por qué ser así.
El agua, si bien no debe tener sabor, muchas veces lo adquiere por distintas razones. Por ejemplo, puede deberse a los químicos que se utilizan en las plantas potabilizadora para hacerla apta para el consumo humano. Por eso, muchas veces tiene un sabor a cloro que no suele ser agradable.
Además, recuerda que el agua recorre km de tuberías para llegar a tu hogar, así que también es probable que algunas de estas no se encuentren en correcto estado. El óxido y los metales pesados que se encuentran ahí terminan adhiriéndose a tu agua, dándole ese sabor particular y desagradable.
Otro motivo por el que tu agua tiene un sabor que no te gusta, puede ser por tu hervidor.
¿Qué puedes hacer si no te gusta tomar agua?
Todo está en la mente, así que es necesario que empieces por ahí.
Si el origen por el que no tomas agua o no te gusta, es porque no has desarrollado el hábito de hacerlo, entonces es momento de que reflexiones sobre el asunto para que te des cuenta de lo que realmente necesita tu cuerpo. Debes empezar a proponerte y esforzarte por cumplir una meta diaria. Recuerda que los especialistas indican que una correcta hidratación equivale a aproximadamente 8 vasos de agua al día.
Para que puedas cumplir con tu objetivo diario, te compartimos estos 5 consejos que te ayudarán a mantenerte hidratado, si, como muchos, piensas «no me gusta el agua»:
- Recurre a tus frutas favoritas: Esta opción es tan fácil como cortar en trozos tus frutas favoritas y agregarlas a tu jarra de agua para darle un poco de sabor.
- Ponle gas: Hoy en día existen máquinas gasificadores de bebidas que te permiten ponerle gas a tu agua al instante, desde tu hogar. Y lo mejor de todo es que es saludable.
- Toma infusiones: Un rico té nunca está de más. Lo mejor de todo es que puedes disfrutarlo caliente o helado. Prepara tus infusiones favoritas y tenlas a tu alcance.
- Busca otras maneras de hidratarte: No necesitas tomar agua necesariamente para mantenerte hidratado. También puedes optar por consumir frutas y verduras ricas en agua.
- Ten un tomatodo: Si tu problema es que no tienes agua a la mano, con un tomatodo a tu lado será más que suficiente. Incluso hoy en día existen modelos con medida que te permiten monitorear de una mejor manera, tu consumo de agua al día.
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